Septiembre es el mes de la vuelta. Fin de las vacaciones y vuelta a casa, reabren los centros para la vuelta al cole, vuelve el clima soportable tras esos días de infierno. Aunque este año la vuelta es diferente. Sin embargo y con todas las diferencias, la cultura en Granada no debe quedar infectada por desánimos, temores excesivos o supresiones en aras de la prevención.
De los muchos estamentos oficiales y privados que hacen al granadino más humano, administrándole la cultura que los siglos han creado, algunos de ellos ya comienzan a programar sus propuestas.
La primera que lo hace es la Real Academia de Bellas Artes de Granada que, fiel a su cita con Septiembre, este mismo viernes propone el comienzo de su decimonovena Academia Internacional de Órgano que continuará hasta el domingo 13 de septiembre en los más escogidos órganos de nuestra ciudad.
La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía también abre uno de sus espacios más íntimos, cual es la Casa de los Tiros, para que, en colaboración con el Ateneo y el Centro Andaluz de las Letras, podamos disfrutar de una nueva entrega de Poesía en el Jardín. Será todos los martes de este mes a las 9 de la noche. El Patronato García Lorca retomará, entre los días 15 y 17, sus ‘Cristobicas en la Huerta de San Vicente’, que simplemente cambian de fecha desde su mes habitual que suele ser julio.
Un recuerdo a Federico en los ojos más infantiles de Granada. De esta forma se enaltecen los espacios abiertos, ideales para espectáculos en estos tiempos de infecciones, como también lo hará el festival Milnoff-Granada Siente Flamenco, en toda la segunda quincena de mes.
El Auditorio Manuel de Falla tardará en abrir sus puertas. Pero también lo hará con las más estrictas medidas de seguridad, como ya lo hizo impecablemente durante el pasado Festival de Música. Será el domingo 27 para que la Orquesta Clásica de Granada, dirigida por Miguel Sánchez Ruzafa, interprete ‘Cantos e himnos populares de Granada’
Sin fecha fija
Hoy mismo reabre sus puertas el Centro Artístico, en su horario habitual. Pronto dará a conocer su siempre interesante ciclo de conferencias y, sobre todo, la fecha de presentación del nuevo número de su Boletín, de tanta solera en Granada. Y, hablando de presentaciones, también hará que estar atentos a la presentación del número de Septiembre de la ya prestigiosa revista ‘Alhóndiga’, que con tan envidiable tesón dirige Ana Sánchez. Un ramillete de las mejores firmas de Granada siempre es un regalo para nuestra biblioteca.
Para la empresa privada no ha habido verano. La gestora del Palacio de Congresos, uno de los lugares más seguros de Granada, por la amplitud de su sala, continúa programando su ‘Granada Alive’ desde el 17 de julio. No perderse el recitar de Ara Malikian este próximo viernes día 4, a las 10.30: Violín y brío para exorcizar muermos y desdenes. Ya en la calle, empresas como Granada Singular continúan con sus visitas especializadas y rutas temáticas por los lugares más recónditos de la ciudad.
La Universidad de Granada, el buque insignia de tantas cosas en su distrito, aún no ha puesto fecha concreta para la reapertura de su Centro de Cultura La Madraza, tanto en su ciclo de conferencias como en el afamado Cine Club que tan acertadamente dirige Juan de Dios Salas. Porque una entidad de su prestigio no puede seguir con actividades sólo ‘online’.
Y muchos más actores culturales de Granada siguen cuadrando calendarios. Estaremos atentos a sus propuestas.
Ya se dan por perdidas la Feria del Libro y otras actividades similares. No se puede perder ni una más. Por ejemplo La Alhambra no puede dejar pasar un semestre más sin ofrecer sus excelentes visitas guiadas por especialistas. No existe excusa. Si los asistentes cumplimos con las normas, los organizadores no tienen en qué apararse.
Cuando se acerque octubre, cabalgando entre dos meses, veremos Granada llenarse de Música Antigua, de Tango, abrir el Isabel la Católica, el Teatro Alhambra…
Seremos menos los asistentes a cada acto, para guardar la llamada distancia personal, por eso habrá que repetir algún espectáculo consiguiendo satisfacer todas las demandas.
Pero nadie debe escudarse en la pandemia para rebajar un ápice el nivel cultural de esta ciudad. Nada sabemos del futuro pero nuestro presente, por ahora, mejora mucho si nos adiestramos en pensar, razonamos con criterio y atesoramos el conocimiento que tantos, muchos de los cuales ya nos están entre nosotros, se esforzaron en dejarnos como legado.